Maru y Chiu

Si el Amor es una isla

se llama TABOGA

Maru y Chiu es una pareja llena de energía, buena vibra y muchísimas ideas! Un 31 de enero me embarqué en un ferry por 30 minutos sin saber qué esperar de la Isla de las Flores, la última vez que estuve ahí fue hace más de diez años. Me recibieron Maru y Chiu con una sonrisa en sus rostros y con todas las intenciones de madrugar al día siguiente y sacar el mayor provecho de la mejor luz que puede haber… la luz del amanecer.

Taboga fue el escenario perfecto para retratar a los novios, su amor se ve reflejado en cada sonrisa, gesto y en especial, sus miradas. Eran las 6:00 am, Maru y Chiu estaban listos y empezamos a recorrer cada espacio de la mágica Villa Caprichosa. Un lugar con un aire italiano y los diez años que tardó su construcción nos pueden dar una idea del por qué es un lugar tan maravilloso. Cuando menos lo esperábamos, Maru y Chiu fueron iluminados con una luz única y ellos nos regalaron su mejor sonrisa.

Sólo me queda desearles que esa alegría y su amor perdure, que Chiu le siga sacando esas sonrisas tan contagiosas a Maru y que su matrimonio sea el reflejo de ese maravilloso noviazgo. Gracias por confiar en nosotros y permitirnos contar su historia de amor.